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La voz del Mallinckrodt I EL colegio
Objetivos Institucionales 2020
Apaga Madre mía este incendio,
pues no hay razón para que yo
pierda todo estando Tú en mi casa.
La frase, lejos de referirse a los múltiples incendios que Seguramente cada maestra o profesor -como me ocu-
lamentablemente azotan en la actualidad los campos rrió al escucharla-, pensamos en que ciertamente no
de muchas de nuestras provincias, fue pronunciada hay razón para sentir preocupación, angustia, ago-
por el encomendero español, Don Manuel de Salazar, tamiento, desolación al contar con la protección de
refiriéndose a la cosecha de algodón que ardía en su Nuestra Madre, la Virgen María, sabiendo que Ella vela
casa allá por el siglo XVII, amenazando con echar a siempre por cada uno de sus hijos. Pero asociando
perder todos sus esfuerzos y riquezas. La Virgen, bajo siempre su presencia e intercesión, a aquellas situacio-
la advocación de Nuestra Señora del Valle, intercedió y nes usuales o cotidianas, de la vida familiar o laboral…
el fuego se extinguió.
En febrero de este año cuando escuchamos la frase, Primer objetivo institucional
lo hicimos todos los docentes reunidos en la primera
jornada del año. Allí se efectuó la presentación de los Con el correr de los días y el inicio de las clases, la
objetivos institucionales que procuraríamos entre todos frase quedó guardada en nuestros corazones. Se suce-
llevar a la práctica. Pero dieron las compras de cuadernos, preparación de mo-
chilas, pruebas de uniforme y zapatos, reencuentros en
nunca imaginamos que el “incendio” que la puerta del colegio, planificación de reuniones, inicio
efectivamente llegaría a nuestras vidas, de un nuevo año como los ya habituales. Hasta que la
tendría las características del período de suspensión de las actividades nos sorprendió a todos. Y
aislamiento social preventivo y obligatorio, la frase volvió a resonar con mayor fuerza en el corazón.
y menos aún, que implicaría en un sentido, Desde ese momento, el “incendio” hizo que todas nues-
tantas “pérdidas” y aprendizajes para cada tras vidas comenzaran a tomar giros inesperados. Y
uno de nosotros. hasta el primero de nuestros objetivos institucionales,
requirió de pronta adaptación.
“Año Mariano Nacional: A partir de la relación personal
con la Virgen María, salir al encuentro del otro, cultivan-
do las virtudes de la caridad y la responsabilidad en el
mutuo cuidado”.
Siguiendo la invitación de nuestros obispos, con motivo
de los 400 años del hallazgo de la imagen de Nuestra Se-
ñora del Valle y los 500 años de la primera Misa celebrada
en territorio argentino -en Puerto San Julián-, nos propusi-
mos mirar y honrar de manera especial a Nuestra Madre.
Una serie de encuentros, congresos, peregrinaciones,
iban a tener lugar, llevándonos a recorrer los pasos de
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